El modelo de China: erradicar la pobreza extrema

2021-07-05 03:12PorMEKABOR
今日中国·西班牙文版 2021年7期

Por JÉRÔME KABORÉ

La voluntad política del PCCh ha jugado un papel determinante en este aspecto

EL Partido Comunista de China (PCCh) cumple 100 años este 2021, lo que lo convierte en un año de celebración y de importancia histórica y simbólica para el pueblo chino. Bajo su liderazgo, China ha alcanzado un desarrollo espectacular y ha logrado erradicar la pobreza extrema en todo el país.

Con la celebración del centenario del PCCh, la gran pregunta que mucha gente se hace es cómo la república Popular China ha logrado erradicar la pobreza extrema en su suelo durante un lapso de tan solo unas décadas, un objetivo establecido por las naciones Unidas que, en primera instancia, parecía una concepción teórica utópica para muchos países, especialmente en África.

China nos ha enseñado que no tenemos que ser fatalistas con la pobreza y ha proporcionado un punto de referencia al estar dispuesta a compartir su experiencia en la erradicación de la miseria para construir una comunidad con un futuro compartido para la humanidad.

28 de junio de 2017. Murales en 3D de la aldea de Houfan, ciudad de Fenghua.

Una serie de factores

El secreto chino, que ha hecho posible identificar pueblos y personas afectadas por la miseria, guarda relación con múltiples factores.

En primer lugar, los líderes chinos han hecho del desarrollo el objetivo final, implementando reformas audaces y promoviendo la apertura. Hicieron un gran trabajo en la educación de la población y en la superación de la pobreza como un esfuerzo personal, a fin de que las personas comprendieran que podían superar su difícil situación siempre que estuvieran dispuestas a entregar todo de sí y a comprometerse con su mayor esfuerzo. De esta forma, el pueblo chino se esmeró sin esperar la ayuda del Gobierno ni otras fuentes de apoyo financiero, se arremangó la camisa rápidamente y se puso manos a la obra.

12 de abril de 2020. Un hombre trabaja en un centro de cultivo inteligente de arroz en el poblado de Laoqiao, provincia de Jiangxi.

En el libroXi Jinping: La gober-nación y administración de China, el presidente Xi, quien siempre ha estado convencido de que solo se puede salir de la miseria después de emanciparse de la pobreza ideológica, motivó al pueblo chino para que entendiera que contaba con todos los medios para salir adelante. Para salir de la pobreza, Xi instó a sus compatriotas a verse a sí mismos como “la clave para resolver la escasez de fondos y materias primas”. Este cambio de actitud fue fundamental para impulsar la prosperidad endógena. Según Xi, la gente no debe esperar las respuestas a todos sus problemas de otros, sino que debe encontrar soluciones por sí misma. El incansable esfuerzo en pos de la educación y la concienciación de la población ayudó al pueblo chino a comprender que la pobreza no es una cuestión del destino, sino que puede superarse con éxito aunando el coraje, la agudeza de la mente, un fuerte sentido de responsabilidad y los métodos correctos.

Una clara visión política

La voluntad política del PCCh ha jugado un papel determinante, al poner la lucha contra la pobreza y la revitalización rural de China como ejes centrales en la agenda del país. En ese sentido, las acciones emprendidas hablan más que las palabras, ya que el Gobierno central hizo del alivio de la pobreza rural parte de un esfuerzo mayor con el fin de establecer una sociedad moderadamente próspera para todos en China. En 2015, el presidente Xi se comprometió a erradicar la pobreza extrema para 2020, en consonancia con el primer objetivo centenario establecido por el PCCh: el advenimiento de una sociedad modestamente acomodada en todos los aspectos para 2021. Este compromiso del PCCh desencadenó una implacable campaña de lucha contra la pobreza, la cual logró una revitalización transformadora de las zonas rurales de China en una escala y duración sin precedentes, y que ha beneficiado a decenas de millones de personas que han visto su vida ostensiblemente mejorada.

Las inversiones bien pensadas han conducido a éxitos merecidos. Para la erradicación de la pobreza extrema en China, considerada un verdadero milagro humano, los gobiernos de los diferentes niveles administrativos de todo el país llevaron a cabo inversiones materiales y financieras sostenidas para promover el desarrollo de las comunidades más pobres. Durante los últimos ocho años se han asignado 1,6 billones de yuanes (250.000 millones de dólares) a la mitigación de la pobreza. En algunas provincias, las comunidades habitadas mayoritariamente por minorías étnicas de bajos ingresos se han trasladado de zonas inhóspitas y remotas a pueblos y ciudades nuevas con mejores servicios y acceso vial. De esta forma, millones de personas han podido mudarse a nuevos hogares, toda vez que se han construido y renovado millones de viviendas.

En otras provincias, los funcionarios han ido de puerta en puerta para identificar a las familias pobres con el fin de brindarles capacitación vocacional, subvenciones para la creación de empresas y fácil acceso a los mercados y al financiamiento. Asimismo, se ha construido infraestructura como carreteras, caminos, ferrocarriles de alta velocidad, hospitales y escuelas. Por último, se han introducido fórmulas para la obtención de créditos e incentivos fiscales, así como fondos especiales para la reducción de la miseria.

En tan solo unos años, los niveles de vida han mejorado radicalmente en China. El ingreso medio per cápita en las zonas rurales pobres ha aumentado de 6079 yuanes en 2013 a 12.588 yuanes en 2020. tras la superación de la pobreza extrema, se prevé una transición gradual hacia la revitalización rural en cinco años. La Oficina del Grupo Dirigente para el Alivio de la Pobreza y el Desarrollo del Consejo de Estado se ha reorganizado en la Administración nacional de revitalización rural.

Estos logros récord en la historia de la humanidad han mejorado enormemente la calidad de vida del pueblo chino, mostrando a otros países, especialmente los en vías de desarrollo, que la pobreza sí puede ser erradicada.