Por RUBÉN TANG
A inicios del presente año nos dejó el maestro y distinguido sinólogo peruano Guillermo Dañino Ribatto a la edad de 93 años.Tuve la inmensa fortuna de ser su amigo por muchos años y de aprender constantemente de él su vasto conocimiento de la cultura china,así como seguir su inmensa producción académica y su gran interés por difundirla,una labor que él abrazó como verdadera vocación de vida y con un entusiasmo infinito.Asimismo,colaboró activamente en las actividades culturales del Instituto Confucio de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) al brindar conferencias sobre diversos aspectos de la cultura china.En mi opinión,el profesor Dañino debe ser considerado como uno de los más destacados difusores de la cultura china en el mundo hispanohablante.
Nacido en la ciudad de Trujillo,en Perú,en 1929,Dañino ingresó desde muy joven a la Congregación de los Hermanos de las Escuelas Cristianas de La Salle (Hermanos de La Salle) y fue enviado a la ciudad de Arequipa para empezar su proceso de formación como religioso y educador,labor que lo marcaría para toda la vida.Graduado en Filosofía y Teología,posteriormente estudió el doctorado en Lengua y Literatura en la PUCP,un posgrado en Educación en el Centro Internacional Lasillista de Roma y finalmente se graduó en la especialidad de Semiótica en la Escuela de Altos Estudios en Ciencias Sociales de París.
A través de una invitación de la Embajada de China en Lima y cuando tenía 50 años,viajó por primera vez a ese país en 1979 para enseñar lingüística y literatura a los profesores de esas especialidades en la Universidad de Nanjing y luego también en Beijing.Después de casi treinta años de residencia en el país que según él marcó su vida porque le dio nuevos valores y cambió su visión del ser humano,regresó al Perú de manera definitiva.Pese a ello,nunca dejó de visitarlo al menos una vez al año para continuar con sus labores de investigación.Su estancia en China por muchos años fue también una oportunidad para combinar sus labores docentes con el aprendizaje de manera autodidacta del idioma chino que desconocía totalmente antes del viaje,gozar de la belleza de sus caracteres y sus significados,así como viajar por sus diversas provincias,de las que conoció 33 de 34 para conocer de manera profunda su cultura,su historia y sus tradiciones.
El número de libros publicados por el profesor Dañino llegó a 26,muchos de ellos vinculados con la traducción de clásicos chinos y de divulgación cultural.Entre sus libros más destacados podemos mencionar:Desde China,un país fascinante y misterioso(2002) sobre sus experiencias vividas durante su estancia en China;Esculpiendo dragones(1996),una antología de la literatura china en dos tomos;La pagoda blanca(1996),un estudio de cien poemas de la dinastía Tang (618-907 d.C.);Manantial de vino(1998),un texto que introduce a la obra poética de Li Bai;
Sobre un sauce,la tarde(1998),traducción de la poesía de Zhang Kejiu;Bosque de pinceles(2001),dedicado a la obra de Du Fu;La abeja diligente,traducción de 1000 proverbios chinos;La montaña vacía(2004),una completa antología de poética china;
Leyendas del Lago del Oeste(2006),leyendas populares de la ciudad de Hangzhou,capital de la provincia de Zhejiang;yEnciclopedia de la cultura china(2013),su última obra en donde describe con detalle diversos aspectos de la cultura del país asiático en forma didáctica.También escribió un libro personal denominadoPuente de porcelana(2000),en donde se compilan 80 poemas propios inspirados en agradecimiento a sus experiencias personales durante su vida en el “país del centro”.
Rubén Tang visita al sinólogo peruano Guillermo Dañino (izq.) en su casa en Lima,en 2016.Foto cortesía del autor
Otra de las facetas en las que destacó durante su estancia en China fue la de actor,pues representó diversos personajes en más de 30 películas y documentales,desde el gran misionero jesuita italiano Matteo Ricci hasta los embajadores de Estados Unidos en China Patrick Hurley y John Leighton Stuart.Ello fue motivo para publicar una obra autobiográfica titulada¿Y ahora quién soy yo? (2005),en donde describe detalladamente su experiencia como actor en China.
Como él mismo lo afirma en el prólogo de su libroDesde China,un país fascinante y misterioso,“descubrir China desde dentro constituyó para mí una revelación”.Precisamente,sobre la base de esta afirmación,el maestro Dañino nos enseñó de forma precisa sobre cómo un extranjero que visita por primera vez China debe acercarse a esta: apreciando su belleza,estudiando su cultura y comprometiéndose con su gente.Y para aquellos que ya la conocen es un acicate para estudiarla mucho más y comprenderla desde visiones y perspectivas diferentes.
El legado del profesor Dañino es realmente impresionante porque considero que se convirtió en un verdadero puente cultural entre el Perú y China a través de sus publicaciones.Además,es meritorio mencionar también la contribución del profesor Dañino a la formación en el conocimiento de China dentro de las diversas comunidades peruano-chinas,las instituciones públicas y privadas y el público en general,a través de las innumerables conferencias que dio y en donde demostró su humildad,su calidad humana y un total desapego a todo interés económico a la destacada labor que realizó en el ámbito cultural.
Cada vez que lo visitaba en la oficina de su casa,en donde él llevaba a cabo su trabajo académico,siempre me mencionaba con mucha alegría sobre los nuevos proyectos que tenía en mente y algunos borradores de libros que él ya había acabado de escribir,pero que estaba en la búsqueda de alguna editorial que estuviera interesada en publicarlos.Me expresaba también su enorme preocupación sobre la falta total de interés actual en el aprendizaje de todo lo que no sea rentable y,por ello,él seguía batallando en esa tarea titánica y casi quijotesca a pesar de las restricciones que encontraba en el camino.
En ese sentido,como un homenaje póstumo a esta labor pionera y encomiable que el profesor Dañino realizó por muchos años,sería muy importante,en primer lugar,que se pudieran publicar aquellos textos que no vieron la luz en su oportunidad por diferentes razones para continuar de esta manera con su misión de promover aún más los estudios sinológicos en el Perú y en América Latina,donde todavía hay una tarea pendiente por desarrollar.En segundo lugar,sería muy recomendable la reedición de los libros del profesor Dañino cuyos ejemplares ya no están disponibles para su venta.La totalidad de sus libros fueron publicados en formato físico,por lo que sería ahora muy conveniente publicarlos también en formato digital para que sea más accesible su lectura,especialmente para aquellas personas que no han podido todavía conocer la vastedad de su obra y la importancia de su legado.
Finalmente,quisiera destacar su trabajo en el ejercicio de la docencia que él desempeñó con verdadera pasión y devoción.Los estudiantes que escuchamos sus clases y sus conferencias comprobamos las excepcionales cualidades pedagógicas del maestro Dañino.Poseía una claridad expositiva magnífica,un dominio de la cuestión,pero sobre todo un gran entusiasmo en la transmisión de sus enseñanzas.Todo ello lo combinaba con una gracia para elegir datos y anécdotas,que,con su inolvidable sentido del humor,volvían amenas y atractivas sus exposiciones.
Como decía el maestro Confucio,“si camino con dos personas,es preciso que entre ellas encuentre a un maestro”.Este proverbio confuciano calza perfectamente con la vocación docente del profesor Dañino y el impacto que tuvo en la vida de muchas personas porque él siempre tuvo una disposición de apertura,una actitud humilde de aprendizaje y un reconocimiento de un hecho importante en las relaciones humanas: todos tienen algo que enseñar,lo que importa es saber recibir,esto es,reconstruir la historia del mundo desde la actitud del compartir.Aprender a preguntar,escuchar,observar y admirar es necesario para el intercambio y el entendimiento entre las diferentes culturas y civilizaciones.
Esta capacidad de transmitir su gran amor por el país que lo acogió muchos años y que lo hizo suyo se resume en uno de sus poemas:
Li Bai transforma en versos una jarra de vino,
Du Fu escribe un poema de sus tristezas,
Wang Wei canta los gozos profundos del espíritu
y los tres se abrazan en el mismo camino.
Gracias por todo,querido amigo,por formar discípulos que continuarán con tu misión de tender puentes culturales entre los diversos pueblos,lo cual ayudará al fortalecimiento de la amistad,la armonía y el desarrollo en el mundo.Descansa en paz.